Dionel Vecchini
SEATTLE, WA — Ajustando la mira en el segundo tiempo, Jesús Ferreira marcó el único gol en la victoria de los Seattle Sounders ante San Diego FC. El tanto fue un grito de desahogo, de esos que se sienten más allá del marcador.
Ferreira rompió así la sequía goleadora desde que llegó al club. Cuando el balón tocó el fondo de la red, el delantero hizo un gesto con las manos como sacudiéndose un peso invisible. “Algo salió de mi cuerpo”, dijo emocionado. Jesús quedó a solo dos goles de Landon Donovan por el récord de más goles antes de los 25 años (56).
Ya en la primera mitad, Ferreira había tenido una oportunidad similar, pero no pudo definir. El delantero aprendió, corrigió, y la segunda vez, no falló.
“En el primer tiempo traté de controlarla con la parte de abajo del pie y se me fue larga. Para la segunda, me preparé con otra técnica. Es uno adaptarse a la manera que viene el balón y aprender de los momentos en el partido”, explicó Ferreira.
Pero el juego se definió también en el otro lado del arco. Stefan Frei con al menos dos atajadas claves para su equipo. “Stefan Frei es el mejor portero de la liga, eso es un hecho”, sentenció Brian Schmetzer.
Pero no todo fueron luces. El Sounders sufrió una nueva baja en defensa: Kim Kee-Hee salió lesionado y se sumó a una larga lista. Con Jackson Ragen aún en restricción de minutos, el juvenil Stuart Hawkins tomó el lugar del coreano. No desentonó. “Él estuvo genial, superó las expectativas. Tenemos mucha confianza en él”,aseguró Schmetzer.
El equipo ha sobrevivido bajo un lema: “el siguiente, póngase de pie”. Eso les ha permitido suplir bajas y mantener el ritmo para seguir sumando. Esto demuestra que el Sounders no es solo una alineación, sino una idea colectiva. Un sistema que funciona porque todos creen en él, donde cualquiera puede dar un paso al frente y convertirse en protagonista.
Con Kee-Hee fuera, todo apunta a que Jackson Ragen deberá volver este domingo ante Minnesota United. Si el central sigue en restricción de minutos, Stuart volverá a la escena. La confianza de su técnico se fortaleció: “Está defendiendo a jugadores de la talla del ‘Chucky’ Lozano. Si sigue así, quiere decir que está listo”, dijo Schmetzer.
Además de los ajustes individuales y el sacrificio, el cuerpo técnico también tuvo que adaptarse. San Diego pobló el medio campo y les cortó el juego. “Nos reagrupamos para el segundo tiempo, cambiamos cómo presionar, y el equipo se adaptó bien”, contó Ferreira. “Dejamos a Jesús arriba y bajamos a Albert con Obed como enganches. Ellos no pudieron hacernos perseguirlos y nos mantuvimos en bloque”, añadió el técnico.
El resultado de las variantes demuestra que el Sounders no improvisa, que hay un trabajo en todas las líneas del club y que, con un poco de suerte, se puede salir adelante mientras el Sounders recupera a sus figuras.
El fútbol a veces nos recuerda que no basta con un buen planteamiento, ni con tener mejores jugadores que el rival. De vez en cuando, el simple hecho de quererlo más abre la puerta a eso que algunos llaman suerte, y lo que convierte las derrotas en victorias.
Llámelo empuje, trabajo, determinación. O, quizás como lo resumió Brian Schmetzer…
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